Anteriormente se ha señalado la revolución potencial que los drones están aportando a las industrias como la agrícola, de la construcción, de la minería, del petróleo, del gas, la mediática, etc… En cambio, uno de los sectores donde existe una gran expectación es en la mensajería, y se augura que en un futuro no muy lejano será tan normal ver drones repartidores como lo es hoy en día ver camiones de reparto de empresas como DHL, Amazon, etc…
El futuro del sector de la mensajería pasa porque los drones estén habilitados para volar más allá de la vista de un operador humano, o como técnicamente se conoce, en condiciones BLOS (Beyond Line of sight). Teniendo una viabilidad técnica y económica razonable, los drones se podrán usar como una opción óptima para entregar bienes de primera necesidad como medicamentos en zonas remotas o poco pobladas, además de en casos de emergencia como desastres naturales, etc…
Ya se han hecho vuelos con estos drones de mensajería resultando unos costes de 15 a 50 céntimos de euro para la entrega a 10 kilómetros de paquetes de 2 kilos. Por lo que a comparación con un envío por tierra estándar los costes se reducen a una quinta parte.
Para que el envío de paquetes por medio de este sistema de mensajería funcione correctamente y se popularice se hace necesario evitar zonas pobladas, líneas eléctricas, zonas de exclusión de vuelo, etc… Para optimizar este proceso la existencia de nodos de aterrizaje predeterminados y/o plataformas de repostaje de carga automáticas posibilitará una autonomía mayor incluso a destinos extremadamente lejanos.
El Autopiloto Veronte en Línea con las Necesidades de la Mensajería
El avance en la legislación que regula el uso de este tipo de dispositivos así como sistemas que garanticen la seguridad de la operación son los factores clave para el desarrollo de usos comerciales como la inspección de edificios, el trabajo policial y obviamente los servicios de mensajería. En este sentido Veronte ha sido completamente desarrollado de acuerdo a la normativa aeronáutica DO254 y DO178, aportando la fiabilidad requerida en este tipo de equipos.
Los modelos más comunes de drones para el envío de mensajería suelen llevar la mercancía externamente y necesitan aterrizar; pero algunos modelos incorporan una mini bodega interna. Al no transportar la carga externamente, no se necesita aterrizar, con lo que al llegar al punto de entrega, estos drones abren su bodega y lanzan con la ayuda de un paracaídas o hacen descender la carga con un cable. El autopiloto Veronte integra módulos para el desarrollo de estos diferentes tipos de misiones, así como algoritmos de control adaptativo que permite ajustar el control de vuelo a la carga de pago incorporada o a su liberación, optimizando de esta forma su vuelo.
Con la integración del Autopiloto Veronte en los drones para el envío de paquetes o mensajería, se consiguen drones con todas estas características, desarrollando vuelos totalmente autónomos. El Autopiloto Veronte con su interfaz intuitiva permite configurar rutas de repartos para llegar al punto de entrega, simplemente con seleccionar un punto en el mapa el sistema traza una ruta optimizada. Asimismo permite trazar rutas de reparto predefinidas para llegar a las zonas de reparto. Para garantizar la seguridad durante el vuelo, el Autopiloto Veronte se sirve de “Sense & Avoid”, de transpondedores y de obstáculos predefinidos para lograr el objetivo de la entrega.
En definitiva, próximamente ya no tendremos que abrir la puerta para recibir un paquete, probablemente estaremos esperando en nuestra azotea a que nos llegue mediante un dron de mensajería nuestro envío, incluso en rascacielos.
